La captura en Medellín de Luigi Belvedere, alias “El Colombiano”, un capo de la droga buscado en 196 países, fue facilitada por la publicación en redes sociales de una foto que mostraba su visita a la tumba del narcotraficante Pablo Escobar.
Belvedere, buscado a través de una circular roja de Interpol, estaba señalado por la Fiscalía Antimafia de Nápoles, Italia, de coordinar nexos entre la mafia Camorra y bandas locales como La Oficina y el Clan del Golfo para obtener cocaína y enviarla a Europa.
El arresto se realizó el 24 de octubre de 2024 como parte de la operación CARONTE, con la colaboración de la Dirección de Inteligencia Policial, la Dirección de Investigación Criminal (DIJIN), INTERPOL, y agencias antidrogas de Italia y el Reino Unido. Las investigaciones lo identifican como el principal enlace entre narcotraficantes colombianos y la mafia Camorra, organizando el tráfico de cocaína hacia España, Alemania, Holanda e Italia.
La red de Belvedere, altamente estructurada, acondicionaba y almacenaba la droga en embarcaciones con destino a puertos europeos, desde donde se distribuía a ciudades como Nápoles y Caserta. Según las autoridades, su captura representa un golpe significativo contra el crimen transnacional, al desarticular una pieza clave de la mafia italiana en Suramérica y fortalecer la seguridad internacional.
En el último mes, las autoridades identificaron al menos cuatro inmuebles que utilizaba de forma aleatoria para evitar ser localizado.
Originario de San Clemente di Caserta, al norte de Nápoles, Belvedere fue condenado a 18 años de prisión por tráfico de drogas, pero estaba prófugo desde diciembre de 2020.