Jennifer Lopez y Ben Affleck han puesto fin a su matrimonio de dos años, una separación que ha capturado la atención mediática tras meses de especulaciones. El 20 de agosto, en lo que habría sido el segundo aniversario de su boda, la cantante y actriz solicitó el divorcio en el Tribunal Superior de Los Ángeles, Estados Unidos.
Mientras la intérprete de “Jenny from the Block” tomaba esta decisión, Affleck se encontraba al otro lado del país, en la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut, ayudando a su hija mayor, Violet Affleck, a instalarse para su primer año de estudios en la institución privada.
Lopez presentó la demanda de disolución del matrimonio ante el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles, según los registros judiciales. La solicitud, de la que informó por primera vez TMZ, se presentó en el segundo aniversario de la lujosa celebración de la boda de la pareja en la casa de Affleck en Georgia.
Los representantes de Lopez y Affleck no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Esta noticia era esperada desde hace meses, tras conocerse que la pareja había dejado de convivir y que el actor ya no compartía hogar con la diva del Bronx.
Diversas señales alimentaron los rumores sobre un inminente divorcio: dejaron de usar sus anillos de matrimonio, celebraron sus cumpleaños por separado, y dejaron de aparecer juntos en público.
