Christian Nodal habló de las lesiones que le quedaron en la piel luego de las sesiones a las que se sometió para borrarse los tatuajes.
En entrevista con Luz García para el podcast Noche de Luz, el cantante sonorense confesó que motivado por el nacimiento de su hija Inti se ha sometido a dolorosas sesiones para desaparecer algunos de los diseños que tiene tatuados en la piel.
De hecho, aunque en un principio fue muy criticado por la tinta que lleva en el cuerpo, hoy en día ha sido grandemente elogiado por querer quitar algunos diseños de su rostro, con el fin de que su hija pueda verlo al natural. Desafortunadamente, este proceso le ha dejado lesiones en la piel que apenas está revelando.
“Sí, duele mucho. Yo no soy tan disciplinado con esas cosas de cremitas, tiene mucho que ver todo eso. Se supone que es una sesión cada dos a tres meses. Yo ya tengo tres sesiones”, confesó.
El intérprete de Botella tras botella reconoció que no cumple por completo con las indicaciones para la recuperación de su piel, por lo que se le ha dificultado la sanación de las heridas.
Las heridas que menciona van más allá de simples marcas en la piel; Christian explica cómo estas “causan unas úlceras muy dolorosas, formando protuberancias en la piel, como pequeñas bolsas de líquido, similar a una quemadura básicamente”.
Además, el estilo de vida del cantante, marcado por sus numerosas presentaciones en escenarios iluminados con luces intensas y bajo el calor de los focos, junto con el sudor y el uso constante de sombreros, ha complicado aún más su proceso de recuperación. No obstante, aparte del dolor físico, Nodal ha reflexionado sobre el significado de sus tatuajes y cómo estos han evolucionado con él a lo largo del tiempo. Admite que muchos de los diseños carecen de un significado específico y que, en su momento, los adquirió como un gesto de desafío ante los clichés de la industria musical regional mexicana.
“En su momento me encantaban los tatuajes. Lo hice por rebeldía. Yo sentía que me querían encasillar, como ‘que vaya a ser como don Vicente (Fernández)’. Quería no gustarle a la gente para que nada más le gustara mi música”, explicó.
“Había tantas cosas impuestas que quería romper para que llegue gente de otra generación que entienda que ellos pueden vestirse, ser quienes quieran ser, al final la música es una cosa y la estética de la música, enamórate del proyecto, del artista”, resaltó.