El Parlamento de Venezuela, dominado por el chavismo, aprobó este jueves una ley que impone severas sanciones para quienes respalden medidas coercitivas extranjeras contra el país. Denominada ‘Ley Orgánica Libertador Simón Bolívar contra el Bloqueo Imperialista y en Defensa de la República Bolivariana de Venezuela’, establece penas de 25 a 30 años de prisión, además de inhabilitaciones políticas de hasta 60 años para los implicados.
Detalles de la ley
La normativa, que entrará en vigor tras ser firmada por el presidente Nicolás Maduro, considera como delito promover, instigar o facilitar sanciones internacionales contra Venezuela. Esto incluye restricciones políticas que impedirán a los sancionados optar por cargos públicos o de elección popular.
El texto legal define estas acciones como “traición a la patria” y busca sancionar a quienes “soliciten actos de agresión contra su propia tierra”. Además, es una respuesta directa a iniciativas en el Congreso de Estados Unidos para reforzar las sanciones contra el régimen chavista.
Contexto internacional
La ley venezolana se presenta como un contrapeso al proyecto de ley aprobado recientemente por la Cámara de Representantes estadounidense, impulsado por los congresistas de Florida, Mike Waltz (republicano) y Debbie Wasserman Schultz (demócrata). Este proyecto busca fortalecer las sanciones contra el gobierno de Maduro y prohibir que instituciones federales estadounidenses contraten a empresas con lazos comerciales con Venezuela.
El presidente Maduro calificó la iniciativa como un instrumento para “contrarrestar y derrotar” las medidas norteamericanas, las cuales considera un ataque directo a la soberanía y la economía del país.
Reacciones
Este movimiento legislativo ha generado polémica tanto a nivel interno como externo. Mientras el chavismo lo defiende como un acto de soberanía, opositores y observadores internacionales lo consideran un mecanismo para perseguir a disidentes y silenciar críticas al régimen.